La idea la trajo de Estados Unidos Sergio Jalaff Escandar, y fue el inicio de Grupo Patio, que actualmente cuenta con una cartera que incluye activos de oficinas, comerciales, industriales y residenciales.
El empresario, fallecido en 2021 a los 80 años, incorporó desde los inicios de este negocio a sus hijos Álvaro (43 años) y Antonio (50). Ambos partieron a muy temprana edad en el negocio familiar. Ex alumnos del colegio Craighouse, ninguno posee una profesión.
Según diversos consultados, el gran artífice de lo que hoy es Patio es, precisamente, Álvaro Jalaff Sanz, que desde la fundación de la compañía se desempeñó como su CEO.
Pero este lunes presentó su renuncia a todos sus cargos y posiciones en las que se desempeña en el conglomerado y sus filiales y coligadas, la que fue aceptada por el directorio de la sociedad, y se hará efectiva el 31 de octubre próximo.
Según un artículo de DF MAS de este domingo, su renuncia busca proteger a la empresa, dado los problemas financieros por los que atraviesan sus dos hermanos mayores, Sergio y Antonio, el primero por la financiera automotriz Global, y el segundo, entre otros asuntos, por el escándalo del factoring Factop. Si bien no existe una vinculación directa entre estos dos casos y Patio, ni tampoco con Álvaro, algunos accionistas creen que estos hechos podrían afectar la reputación de la empresa considerando que hoy la firma está muy vinculada a la familia
Jalaff, razón por la cual, creen, los problemas del clan podrían salpicar la imagen de Grupo Patio.
La compañía inició la búsqueda del sucesor de Jalaff Sanz, la que está a cargo del presidente del conglomerado Andrés Solari, quien participa en la mesa en representación del accionista Eduardo Elberg, ex dueño de los supermercados Santa Isabel, que luego pasó a manos de Cencosud.
Hoy, Grupo Patio es comandado por un pacto de accionistas compuesto por Paola Luksic, su marido Óscar Lería y Gabriela Luksic, que en conjunto poseen el 22% de la empresa; Eduardo Elberg con otro 22%; y la familia Jalaff, que tiene un 21% (que está dividido entre Alvaro con un 9%, la sucesión de Sergio Jalaff Escandar un 8,5% y Antonio con un 3,5%).
De Siria a Chile
Lo que se está negociando es poner fin a este pacto de accionistas, lo que permitiría a parte de la familia Jalaff poder vender sus acciones, y así, los que lo necesiten, hacer frente a sus deudas financieras.
El holding inmobiliario está valorizado actualmente en unos US$ 700 millones y gestiona activos por más de US$ 3.000 millones.
Cifras impensadas cuando Sergio Jalaff partió en el rubro.
Hijo de inmigrante sirio, inició su carrera empresarial a los 17 años: fue vendedor viajero de guantes de lana y -según cuentan cercanos al clan- su matrimonio con María de los Dolores Sanz mejoró sustancialmente el patrimonio familiar.
Su primera empresa fue la fábrica de confecciones Pedro Jalaff y Cia, en honor a su padre. Con el pasar del tiempo, siguió creando empresas en el negocio textil.
El visionario empresario dio inicio a los orígenes de Patio en los años 90. Decidió replicar el modelo de centros vecinales de Estados Unidos.
Al comienzo fue bajo el nombre de Administraciones y Renta, empresa que vendió en 2004 y ese mismo año fundó Grupo Patio de forma oficial. Con el pasar de los años fueron adquiriendo más centros comerciales y en 2008 bodegas y oficinas. Una década después, en 2018, dieron el salto internacional e ingresaron a Perú y a México con su modelo multiformato. Luego sumaron EEUU y España.
Según cercanos, la principal inversión de la familia es su participación en el administrador de activos inmobiliarios: tienen otros negocios independientes, pero conocedores coinciden en que Patio es el más importante.
En el caso de Antonio y Sergio, varios consultados coinciden en que venderían todo o una parte relevante de sus acciones en la firma para saldar sus deudas.
Y si bien Álvaro dejará la primera línea, se mantendría ligado a la compañía en roles que deberá definir el directorio. Pero, dice un cercano, no en el corto plazo: ‘Obviamente es importante para la empresa, pero está cansado; se va a mantener como accionista y se va a tomar un tiempo para hacer otras cosas’.